Esta novela delirante tiene una historia no menos sorprendente al margen de sus páginas: cuando su autor se ahorcó en New Orleans considerándose un escritor fracasado, su madre no se detuvo hasta lograr que una editorial publicara el manuscrito. Desde entonces han transcurrido 40 años y somos millones quienes hemos disfrutado las andanzas del obeso Ignatius Railly y la relación con su madre, el capitalismo reinante y el desempleo. La tragicomedia en su pico literario.
Es probable que Julio Ramón Ribeyro haya influenciado a la mayoría de los escritores peruanos actuales sin que ellos se dieran cuenta. Tímido y jamás sentencioso, su prosa elegante hace creer que escribir es fácil: una trampa inaudita. En este portal he encontrado un volumen que contiene varios de sus cuentos inolvidables, a la espera de que se sumen sus “Prosas apátridas”, “La tentación del fracaso” y “Solo para fumadores”: ensayos que iluminan nuestras entrañas.
¿Puede la historia de un metódico maestro de literatura ser tan apasionante como una aventura de corsarios? John Williams alcanzó el milagro escribiendo hacia los primeros años de los 1960 la sencilla historia de un profesor en una universidad de Missouri, su integridad entre traiciones civilizadas, el amor a la literatura y la complejidad de sus relaciones familiares. Los estadounidenses –que todo lo etiquetan— la catalogan dentro de las novelas de campus. Si la vida es un campus, tienen razón.
Nunca voy a dejar de agradecerle a Juan Cruz que me regalara un ejemplar de este libro en Madrid. Mientras Vivian Gornick narra sus paseos con su anciana madre por las calles de Manhattan, entre ellos se cuelan demoledoras reflexiones y recuerdos sobre lo que implicó crecer entre mujeres criadas y que criaban a la usanza del más viejo siglo 20. Las relaciones con los hombres, la visión del amor, la noción del trabajo y, sobre todo, la pugna entre dos modelos de mujer en la mente de la autora: la madre y Nettie, la vecina que no se dejaba encasillar.
Es usual que una primera novela narre el mundo adolescente como un reflejo de la juventud de su autor; lo que no es usual es que alguien haya logrado una obra tan madura sobre ese universo a los 25 años. Para salir sobradamente airosa, Emma Cline se sumergió en la psique de las jovencitas que convivían con Charles Manson y escribió este testimonio ficcionado, tan seductor como perturbador. Es probable que el asesinato de Sharon Tate y sus amigos Jay Sebring, Voytek Frykowski y Abigail Folger haya terminado por clausurar en el imaginario anglosajón la revolución idealista de los años 60 y es posible, también, que este sea el libro de ficción que mejor retrate su contexto.
[en inglés] Iván Cárdenas es un escritor frustrado que rememora cómo, treinta años atrás, conoció en una playa cubana a un hombre, flaco y enfermo, que paseaba a dos impresionantes galgos rusos. A partir de esa imagen enigmática se ramifica una historia brutal, llena de indagaciones, sobre la vida errante de León Trotsky huyendo de Stalin y la biografía de Ramón Mercader, su asesino en México. Brillante.
