No puedes plantear que las experiencias de las escritoras son las mismas, ni siquiera sus reclamos ni estrategias son las mismas, no puedes comparar el trabajo de escritoras que han sido reconocidas, instaladas desde el primer momento, con otras que también escriben y que no son reconocidas, que no son escuchadas en sus ámbitos, que no tienen publicaciones más formales, que viven la discriminación de mil maneras distintas. (Amaro en Abate 2021)