Bárbara Serrano Kieckebusch

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Quotes

Adal Cortezhas quoted2 days ago
desesperados
¿De dónde salía ese odio a los judíos? Entre las numerosas explicaciones posibles hay una que de entrada resulta extraña: la envidia. Es la que propuso en 1933 Siegfried Lichtenstaedter, un alto funcionario bávaro retirado, judío y a la vez alemán hasta la médula. En sus ratos libres escribía novelas en las que abundan las profecías. Acierta a menudo, y volveremos sobre él más adelante. Afirma que el resentimiento de los antisemitas nace de la envidia. Envidian a los judíos porque son cultos, ricos, exitosos, más felices que ellos. La envidia es una razón suficiente para odiar. Al envidioso puede carcomerlo el rencor, pero nunca admitirá que en el fondo desearía parecerse al otro. Muy al contrario, lo denigra, asegura que le repugna, lo tilda de ladrón, canalla, inmoral, estafador, astuto si tiene éxito, parásito si no lo tiene, despreciable en cualquier caso. Niega querer llegar a ser como él. Solo sentirá una impagable satisfacción si el otro cae en desgracia, si pierde lo que el envidioso considera ventajas y privilegios. En alemán existe incluso un término específico para designar el disfrute, la alegría por la infelicidad ajena: Schadenfreude.
Adal Cortezhas quoted12 hours ago
El filósofo Carl Schmitt defendió que Hitler encarnaba la justicia, la justicia viva que emanaba del pueblo, no aquella que se empantanaba en «sofismas». «El Führer siempre es también el Juez [...] No está subordinado a la Justicia, sino que él mismo es la Justicia», sostuvo el «ilustre jurista» para legitimar la Noche de los Cuchillos Largos, en la que Hitler se arrogó a un tiempo el papel de fiscal, juez, jurado y verdugo.
Adal Cortezhas quoted11 hours ago
Ningún partido escapa de la corrupción. Todos están divididos en facciones y corrientes que se despedazan entre sí. Los líderes y los hombres del sistema tienen un rasgo común: se ponen la zancadilla y hacen carrera a codazos.
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