que Stempel logró con su obra fue comenzar el proceso de reencuadrar la revalorización de la autoría televisiva desde la figura del productor al guionista a través del siguiente planteamiento: si las series merecían la pena ser estudiadas no era tanto por sus valores de producción o coherencia, sino por la calidad de su escritura, esto es, temas, caracterizaciones de personajes y diálogos. El término «showrunner», utilizado para designar a la principal figura creativa de un programa, comenzó a circular en la industria en los ochenta y se acabó haciendo tan popular como para dar título a un libro del periodista de Rolling Stone David Wild dedicado a mostrar los entresijos de la televisión norteamericana, The Showrunners: A Season Inside the Billion-Dollar, Death-Defying, Madcap World of Television’s Real Stars (1999). En el libro, el veterano de Luz de Luna Roger Director dio una particular definición del término: «Ser un showrunner es como ser un experto en desactivar bombas» (p. 7).