1983–2023. La efeméride de los cuarenta años de democracia sucede en medio de un cambio de época, cuando ganan espacio proyectos políticos que sostienen que los problemas que la democracia no pudo resolver se solucionarán con menos, y no con más, derechos.
En este libro, que no busca alimentar una conmemoración acrítica, el equipo del CELS llama a asumir este escenario de derechización, con la certeza de que el consenso valiosísimo del Nunca Más no es suficiente si no se construyen otros. A partir de crónicas que registran los derechos que están en riesgo aquí y ahora, Más que nunca se pregunta cómo traccionar la memoria condenatoria del terrorismo de Estado para que juegue un papel en el presente, ahí donde se ven los frenos que impiden avanzar en la distribución de la riqueza, la timidez para abordar la responsabilidad de las empresas en la crisis socioambiental, la naturalización de las vidas precarizadas y del racismo.
Con ese objetivo, explora los límites que han encorsetado a la democracia, e invita a pensar qué contraponer a eso, cómo lograr una articulación entre el Estado y las experiencias de organización social, qué nuevos acuerdos vamos a asumir. Y también, qué respuesta dar a los jóvenes que dicen “no fueron 30.000” como una forma de rebeldía frente a lo que perciben como un discurso oficial, instalado con la fuerza de una «policía del pensamiento”.
Más que nunca nos insta a discutir, por fuera de los clivajes partidarios: ¿con cuánta desigualdad la democracia sigue siendo democracia? ¿Cómo hacemos hoy para que democratizar sea la clave de construcción de futuro, un proceso de acción colectiva, y para que el realismo político no derive en puro posibilismo o penosa administración de la decadencia?