Este es el vigesimoprimer informe sobre los derechos humanos en la Argentina editado por el Centro de Estudios Legales y Sociales. Se presenta en una coyuntura muy particular, ya que una cantidad de decisiones, medidas y hechos afectan negativamente cuestiones críticas de la agenda y los mecanismos de protección de esos derechos en la Argentina.
En un contexto regional e internacional que –más allá de los colores políticos— es adverso a los acuerdos globales en materia de derechos humanos, la respuesta del gobierno argentino ante hechos graves, la reiteración de represiones y los discursos puestos a circular sobre las amenazas del presente y episodios del pasado reciente, ponen en riesgo los consensos elaborados sobre derechos humanos en el país. A esto se suman decisiones judiciales que apuntan contra algunos pilares de la democracia, como la lucha contra la impunidad por los crímenes de lesa humanidad y el compromiso con los sistemas internacionales de protección.
Esta situación exige resguardar principios en materia de derechos humanos de la dinámica de polarización general. Esa es la mejor tradición social y política construida en la Argentina desde el fin de la dictadura y la base desde donde es posible defender los acuerdos de la democracia.