En el momento mismo en que la Conquista las insertaba por la fuerza en un espacio inventado del todo por Occidente, impuesto por los españoles y delimitado mediante términos y conceptos establecidos —“supersticiones, creencias, cultos, sacrificios, adoraciones, dioses, ídolos, ceremonias, etc…”—, aquellas manifestaciones eran tachadas de errores y de falsedades
Qué pensaban los españoles de las prácticas indígenas